Eros desde el pasado

miércoles, 24 de junio de 2009

Ayer me encontré con un viejo novio, y como ninguno de los dos tenía nada mejor que hacer, terminamos revolcándonos juvenilmente en un hotel de paso. Me sorprendió que su cuerpo estaba más bello de lo que yo lo recordaba, pero lo más grato fue la comodidad. Nos desnudamos como sin nada, como si no hubieran pasado cinco años desde la última vez que habíamos hecho el amor. Así, sin que hubiera sorpresa alguna, lo alcancé en la cama donde me esperaba von el sexo es posición de saludar. Era como regresar al barrio donde te criaste. Por supuesto, él ahora tenía una maestría y seguramente un largo catálogo de amantes de las que no valía la pena que habláramos. Pero sus dedos estaban ahí, donde habían estado siempre. Besarlo sabía a leer un mapa con los ojos cerrados, su lengua, a domicilio conocido. Gritamos y nos venimos toda la tarde. Luego me quedé dormida y cuando quise abrir los ojos, trató de platicarme algo. No lo dejé. Lo hice que se terminara una vez más en mi boca, por los viejos tiempos, y me despedí. Espero no volverlo a ver hasta dentro de cinco años. (Imágen: Otto Mueller)

Comments

No response to “Eros desde el pasado”
Post a Comment | Enviar comentarios (Atom)

Publicar un comentario

 
Sombra, saliva y sexo. Citrus Pink Blogger Theme Design By LawnyDesignz Powered by Blogger